El elemento más distintivo de este enclave es su iglesia parroquial dedicada a San Miguel Arcángel, destacando especialmente su techumbre de estilo mudéjar y el coro, elaborado en madera tallada y datado en el siglo XVI. Gracias a un detallado proceso de restauración, tanto los retablos, como el del Cristo de la Esperanza y el principal, dedicado al patrón San Miguel, han recobrado el esplendor perdido. Además, en Zorita, merecen una visita los vestigios de la antigua ermita y las viviendas construidas conforme a la arquitectura tradicional de la región.
Las festividades en honor a San Miguel Arcángel se llevan a cabo los días 29 y 30 de septiembre.