La autenticidad de Sorihuela se manifiesta de manera notable en dos de sus construcciones más destacadas: la iglesia y la ermita. La iglesia rinde homenaje a Nuestra Señora de la Asunción. Su acceso se realiza a través de una escalera de piedra que conduce directamente a una entrada románica. Esta se construyó progresivamente, fusionando varios estilos que abarcan desde el románico y el mudéjar hasta el gótico, especialmente visible en las dos últimas naves del templo.
El otro edificio destacado, la ermita, es una construcción relativamente moderna, datando de finales del siglo XIX y principios del XX, en el mismo lugar existieron ermitas anteriores. En su interior alberga una talla del siglo XVIII del Cristo de Valvanera.
Además de sus construcciones de piedra, presume de un parque eólico con siete molinos, visibles desde varios puntos del pueblo y sus alrededores. Destaca también la Ruta de los Caños y las Pozas, que recorre distintos puntos del pueblo. La ruta cuenta con un centro de interpretación ubicado en la Casa de los Pobres, en la parte alta del pueblo.
Las fiestas principales son el 20 de enero y 14 de septiembre.